A mayor libertad, mayor responsabilidad: Reforma a la Ley del Infonavit.
La reforma a la ley del Infonavit, sin cambios sustanciales desde 1972, implica en la práctica nuevos retos para los trabajadores, desarrolladores y al mismo organismo.
Para los primeros el mayor obstáculo es el de la mínima educación financiera que se requiere, y que culturalmente falta, para saber cómo aprovechar las ventajas que esta mayor libertad de decisión otorga; para los segundos es momento que busquen nuevas formas de innovar en métodos y materiales de construcción, así como estrategias de venta y financiamiento, que les permita ofrecer vivienda accesible con valor añadido, que terminen con conceptos tan arraigados como el término “casa infonavit” sinónimo de vivienda indigna, obra abandonada o urbanizaciones mal logradas; el reto para el Infonavit es el de traducir las bondades de las nuevas disposiciones en reglas de operación transparentes, eficientes y efectivas.
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Un pedazo de tierra donde edificar tu casa
Hacerse de un pedazo de tierra para construir una casa, ese anhelo aún presente en las nuevas generaciones, será posible con la nueva ley pues, literalmente, contempla el uso del crédito para la compra de un terreno o, en caso de contar ya con uno, destinar el crédito para edificar ahí el futuro hogar, es decir no solo se contempla recibir el crédito sin intermediarios y de manera directa sino una mayor libertad de decisión sobre dónde comprar la casa (o terreno), a la autoconstrucción, remodelación, reparación y ampliación bajo el refinanciamiento de créditos, al quitar la limitante en el número de estos e incluso la posibilidad de otorgarlos a derechohabientes sin relación laboral vigente y en el caso de no ocupar el crédito la disposición clara de entregar el monto ahorrado al jubilarse.
Si bien la reforma le dará valor jurídico a procesos que ya existen en la práctica como el crédito para la autoproducción de vivienda, el uso del financiamiento para pago de pasivos y la entrega del financiamiento sin intermediarios, habrá que esperar que tan efectiva será en el momento que el trabajador obtenga el crédito para obtener un patrimonio digno y en función a sus necesidades y no a las del mercado, quizá los derechohabientes podrán pasar sus créditos bancarios al Infonavit atraídos por una mejor tasa plazo o construir su propia casa pero esto implica algunos riesgos que van desde la seguridad en cuanto a la edificación y la urbanización de la zona donde se realice hasta la vulnerabilidad ante fraudes inmobiliarios. Ya veremos en los próximos años cómo impactará esta reforma.
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